lunes, 8 de junio de 2020

Análisis de los centros de Primera Infancia” UNICEF - FLACSO - CIPPEC.

Informe sobre los Centros de Primera Infancia 
Hemos seleccionado para el análisis y la reflexión los CPI  (Centros de Primera Infancia.). Documento “Análisis de los centros de Primera Infancia” UNICEF - FLACSO - CIPPEC.
Estos centros están destinados a la población con alta vulnerabilidad tanto social, como económica, aunque estos están emplazados en la zona geográfica de Ciudad Autónoma de Buenas Aires (el distrito más rico del país). Estos centros asistenciales tienen como objetivo garantizar el crecimiento y el desarrollo saludable de niños/as de 45 días a 3 años en este momento, ya que la sala de 4 años es obligatoria, hoy en día, según la ley 27045. Fueron creados en 2009 en el contexto de donde, la economía fluctúa y además vivíamos la epidemia de la gripe H1N1, generando grandes conflictos sanitarios. Como siempre, los grupos que más sufrieron estos eventos fueron las clases vulnerables de la sociedad. 
En principio estos centros asistenciales estaban destinados a los niños/as hasta los 4 años. Ya que se proponen acercarlos y “nivelarlos” con respecto a los niños/as que si tienen acceso a la educación. 
En muchos de los casos, la sociedad se ha visto beneficiada ya que los niños/as han mejorado, en muchos casos significativamente, la nutrición, la salud y la educación y además es beneficioso para las familias porque favorece el acceso al mercado laboral. Estos centros cuentan, además, con talleres para las familias y todas la áreas están dirigidas y asesoradas por profesionales como: Profesoras del nivel inicial, psicólogos, psicopedagogos y nutricionistas.  El seguimiento es personalizado. Ha influido positivamente con la estimulación temprana, siendo provechoso para el entendimiento y la motricidad de los niños/as, entre otras cosas, por esta práctica. 
Lo negativo, se podría decir que es la parte de contratación de los empleados, esto genera una rotación constante ya que los docentes no ganan el sueldo  correspondiente, (es mucho menos de que los docentes cobran por mes y están por fuera de convenio docente) estas entidades forman parte del Ministerio de Seguridad Social. Esto conlleva condiciones de contratación paupérrimas, hay docentes desprotegidos trabajando, quizás, en zonas peligrosas, inseguras, están expuestos a fuertes cargas emocionales cuando, por ejemplo, deben asistir a niños/as con violencia familiar. El trabajo, que estos docentes realizan es arduo, deben realizar un abordaje más personalizado e integral. A diferencia de los docentes que dependen del ministerio de educación, no se aplica a ellos el estatuto docente. 
Las salas están divididas por edades, cada sala puede llegar a tener hasta 30 chicos/as. 
Las becas y vacantes son auditadas pero generalmente, las salas, se sobre pueblan porque cada niño es beneficiado con un monto determinado de dinero, este monto es administrado para pagar sueldos, hacer reformas edilicias, comprar la comida material didáctico. 
Los docentes están acompañados por uno o más auxiliares, depende de la edad de la salas. Las auxiliares, no cuentan con título habilitante y generalmente son personas residentes de los barrios. Deben trabajar en conjunto con la docente y conformar una pareja pedagógica. Aquí se dan contenidos pedagógicos, que en este caso están supervisado por un supervisor del Ministerio de Educación de la Nación, destinado para ello. 
Para ingresar al CPI hacen una entrevista a la familia para saber cual es el grado de vulnerabilidad ya que tienen prioridad aquellos niños que son más vulnerables cuanto más alto es el puntaje. es más vulnerable y por lo tanto tiene más prioridad.
 El CPI se configura como una alternativa diferenciada, en función de cuatro elementos clave: a) el trabajo interdisciplinario, tanto hacia el interior de cada Centro como por parte del equipo central; b) el seguimiento personalizado de cada niño/a y de cada familia; c) el vínculo con la familia y la interpelación permanente para que se acerque al CPI; y d) su apertura a la comunidad, plasmada en las estrategias de articulación con el barrio y los efectores que trabajan en el mismo territorio. Los padres reconocen, efectivamente, este rasgo diferenciador de los CPI. Entre quienes tienen experiencia con otro tipo de instituciones (ya sea jardines o guarderías públicos o privados), el 23% opina que el CPI es mejor por la buena atención que brinda, el 21% destaca la buena atención profesional (21%), y el 12% la paciencia de las docentes para enseñarle a los niños/as. La casi totalidad de los padres (99%) evalúa positivamente el funcionamiento del CPI en su conjunto. Dentro de ese porcentaje, una alta proporción (85%) lo califica como “muy bien”. Consultados acerca de los motivos de esa valoración, las respuestas más frecuentes aluden al trato que reciben tanto sus hijos/as como ellos mismos, lo que los niños/as aprenden en el CPI, y el profesionalismo de quienes trabajan allí . Otro dato ilustrativo acerca de la conformidad de las familias con los servicios que ofrece el CPI es el hecho de que el 87% de los consultados respondió que su hijo/a siempre tiene ganas de concurrir, lo cual se deduce de sus reacciones y lo que le cuenta sobre el CPI. 


Nuestra reflexión
Los centros de primera infancia acompañan a lxs niñxs y a sus familias y hace un tránsito de transformación hacia un lugar fundamental y fundante en la vida de los/as niños/as, por esa perspectiva de poder ver la primera infancia como la oportunidad del cambio de una sociedad. Por eso pensamos que lo que hace este programa es determinante para la comunidad.
Muchas veces este lugar, implica un abrazo, una sonrisa, un “te quiero”, una comida calentita, un lugar agradable donde pasar los días. Sin lugar a dudas es una experiencia que no debemos dejar de vivir, de conocer. La docencia es un poco eso, aprender cosas nuevas todos los días.  Por eso es importante  conocer las distintas instituciones informales para poder compartir lo que nosotrxs conocemos y llevarlo a cada niñx para poder dejar una huella en su camino .
Aunque pensamos que no es una tarea fácil para un docente, si tenemos en cuenta que la tarea a realizar no está centrada en lo pedagógico, sino mayoritariamente en lo asistencial. Además los grupos que conforman son bastante numerosos para hacer un seguimiento personalizado, eso intensifica el trabajo y lo convierte en un campo muy difícil de abordar. Aunque que al docente no se lx protege con ningún convenio y el pago es bajo. Creemos que para estar en este tipo de lugares hay que tener  una personalidad muy particular, determinante, solidaria. Poder plantear temas que quizás como docentes no conocemos, en muchos casos, pobreza, violencia, etc. Son realidades lejanas, para mucho de nosotrxs pero existen por lo que hay que acompañarlas y trabajarlas.


Reflexionamos y nos cuestionamos  ¿Cuánto valor hay que tener para trabajar CPI? ¿Cómo una idea tan noble se vuelve tan burocrática?  ¿Cómo un/a docente debe olvidar su estatuto por un empleo y resignar su salario?  ¿Nuestra formación docente nos capacita para realizar este trabajo?  ¿Cómo se aprende a trabajar en los CPI? o ¿Quién nos enseña?

Integrantes del grupo
Crivelli, Florencia
Gandolfo, Laura
Marchese, Agustina
Montero, Gabriela

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